[Haz clic en la imagen para agrandar] Si es que no se puede ser tan despistado. Un día pierdes las llaves, la cartera, el móvil... y cuando te quieres dar cuenta ya no sabes ni
dónde están tus propios
ostiazos, y los dejas al alcance de cualquier desgraciado...
3 comentarios:
¿Pero qué coño...?
Que paranoia, me reíría pero me ha dejado demasiado pillado para reirme... O O
He david, este es el primer comentario que te escribo, no podía dejar pasar la oportunidad por la partida de ojete q me pegao con lo de la ostia movil. Sin duda tu mejor tira, un saludo.
Publicar un comentario